Estos días se cumplen cuarenta años de la muerte de Bill Evans y en Viniland recordamos al ilustre pianista en el Vanguard, ese local de Village neoyorquino en el que, casi sin darse cuenta, cambió la historia de la música.
Bill Evans ya era un catedrático cuando se asoció con Scott LaFaro, un joven y prodigioso contrabajista, y el baterista Paul Motian.
El trío estuvo una semana estuvo en el Vanguard definiendo nuevas reglas para los estándares del jazz en una atmósfera íntima, casi religiosa, muy alejada de los grandes escenarios de las big bands. También perfilaron temas propios destinados a la eternidad, como «Waltz For Debby».
Alguien tuvo la feliz ocurrencia de grabar aquel prodigio. La última sesión del Bill Evans Trio, el domingo 25 de junio de 1961, puede escucharse en varias álbumes.
La mejor opción de todas es la reciente «The Complete Village Vanguard Recordings», una magnífica caja con cuatro vinilos que ya se ha convertido objeto de coleccionistas.
Las sesiones fueron irrepetibles: poco después del último concierto en el Vanguard, Scott LaFaro perdió la vida en un accidente de tráfico.
VINILAND 