
Seis años han pasado desde la anterior entrega de Vampire Weekend. Pero en este tiempo Ezra Koenig, alma de este proyecto, no ha estado escondido en un sótano. Más bien parece haber buscado sonidos alrededor del mundo que aparece dibujado en la portada de «Father of the Bride», el radiante nuevo álbum del grupo. Y ha encontrado tesoros.
Quienes hayan escuchado ya el disco sabrán por qué ha deslumbrado en las primeras escuchas. En Viniland estamos deseando disfrutar de sus 18 canciones en nuestro formato favorito. Pero a falta del veredicto final podemos ir adelantando que estamos sin duda ante uno de los discos del año.