J.Spaceman vuela alto, muy alto. «And Nothing Hurt», el nuevo viaje de su nave, Spiritualized, es un álbum ambicioso, arriesgado, grande.
Jason Pierce, el hombre que se esconde dentro del traje de Spaceman, ha cocinado con su habitual paciencia un proyecto enorme. Y lo ha hecho con su frecuente soledad, conduciendo su nave por espacios infinitos.
Cuenta Pierce que fue grabando «And Nothing Hurt» a medida que reunía el dinero para pagar los grandiosos arreglos orquestales de las canciones. Así están las cosas en la industria discográfica.
Ahora escuchamos en álbum en vinilo, después de un anticipo en formato digital, y no hay duda: el esfuerzo mereció la pena. Los arreglos del disco acercan a Spiritualized al sonido de Phil Spector, de Bowie, de los Beatles…Cuotas muy altas reservadas a los viajes de lo más intrépidos.
VINILAND 