Del viaje de este verano a la isla traje algunas puestas de sol en la cámara y en los bolsillos, mezclada con arena de la playa, las canciones del último disco de John Mayer.
«The Search of Everything» ha sido una estupenda banda sonora a los viajes por territorios que parecen de otro planeta. Ahora, ya de vuelta, lo estoy escuchando en vinilo y está cargado de emociones.
John Mayer es un tipo de gran talento. Buen cantante, excelente guitarrista y un compositor de valía. Con su séptimo álbum, y a punto de cumplir los cuarenta, ha firmado tal vez su disco más completo, con colaboración de sus compinches más fieles: el baterista Steve Jordan y -un saludo para los chicos del Máster- el bajista Pino Palladino.
«The Search Of Everything» suena de maravilla en la edición de doble vinilo. Como la portada no nos ha gustado demasiado, hemos optado por una de esas puestas de sol en la que nos acompañaron sus canciones.
Del viaje de este verano a la isla traje también una ola a la que John Mayer puso letra y música.
VINILAND 