Un himno de los cazadores de estrellas, de los buscadores de sueños en las noche de luna llena. Hace muchos años que levantamos la vista al cielo cada vez que la escuchamos.
Mike Scott firmó su obra maestra en un álbum memorable de los Waterboys, «This Is The Sea». El disco nunca había sonado demasiado bien, hasta su reciente reedición en vinilo.
«The Whole Of The Moon» es un clásico de Viniland. Una de nuestras canciones favoritas con la mejor formación que hayan conocido los escoceses The Waterboys, la que tenía a Karl Wallinger entre sus filas.
Tuvo una producción barroca, al estilo de Phil Spector. Mike Scott dotó a su mejor canción de un sonido grandioso. No lo hubiera logrado de no ser por las excepcionales interpretaciones de dos músicos de estudio: el baterista Chris Whitten y el trompetista Roddy Larimer. Y los coros de Max Edie.
En 1985, cuando fue publicada como single, «The Whole Of The Moon» no fue un gran éxito. Pero estaba destinada a convertirse en una canción de culto, indestructible con el paso del tiempo. Como la luna llena en una noche limpia y estrellada.
VINILAND 